¿Puedo aprender a nadar siendo adulto?

Clases de natacion para adultos

¿Puedo aprender a nadar siendo adulto? Es una pregunta que con frecuencia se hace la gente que por diversas situaciones nunca tuvo la oportunidad de aprender a nadar durante su infancia u adolescencia. La respuesta es muy sencilla: claro que se puede. Ya sea con algún familiar o en clases de natación para adultos, nunca es tarde para desarrollar esta habilidad, pues además de ser una actividad muy divertida y útil, saber nadar otorga al cuerpo grandes beneficios, sin importar que tan chico o grande estés para moverte en el agua.

Sin embargo, otra pregunta que te puede surgir es ¿Qué necesito para aprender a nadar? Para ayudarte un poco en este tema hemos preparado esta entrada.

Decirle adiós a la pena

Lo primero y quizás más importante entender que no es vergonzoso no saber nadar, sin importar la edad. De hecho, las personas que entran a clases en grupo podrán ver desde el primer día que no son los únicos que no saben y que no tiene nada de malo aprender a cualquier edad, después de todo, es una decisión que tomaste como persona y nadie tiene porque decir algo al respecto.

No dejes que comentarios o posibles burlas sean el impedimento que te detenga de aprender algo nuevo.

Se constante en clase

Una vez que tomas la decisión y te apuntas a una clase, debes comprometerte y tener en cuenta lo siguiente:

1. Debes ser constante para cumplir tu objetivo y aprender a nadar
2. Asistir a tus clases sin falta y no tener excusas para no hacer el entrenamiento o los ejercicios.
3. Disfruta todo el proceso de aprendizaje, no te desanime ante retrocesos y si estás en clases grupales, alienta a tus compañeros y crea buenos vínculos con todos, después de todo y como dicen por ahí «están en el mismo barco».

No le tengas miedo al agua

Este es uno de los principales motivos por el cual la mayoría de las personas no terminan de aprender a nadar, ya que pueden desarrollar cierto miedo o angustia al estar en el agua. trata de alejar de tu mente esos temores y concentra tus energías en aprender los movimientos, la respiración y como flotar.

Recuerda que el aprendizaje es paso a paso y conforme avances, tendrás las herramientas necesarias para enfrentar este temor y superarlo. Después de todo, aprender a nadar es más un beneficio que algo perjudicial así que no tienes que darte por vencido al primer temor.